Masaje, beneficios y contraindicaciones

Masaje, beneficios y contraindicaciones.

El masaje es una técnica que se remonta a épocas ancestrales. Frotar con las manos la zona dolorida es un instinto innato en el ser humano. Existen tratados chinos del 3000 a. de C. en los que se describe la práctica del masaje y sus bondades sobre el organismo. Hipócrates ya hablaba de los beneficios de las fricciones para atenuar el dolor del cuerpo. El masaje con aceite de oliva y otros ungüentos era una práctica habitual en las termas romanas... 

El masaje no solo trata afecciones físicas, es también un mecanismo de liberación psíquica; un remedio para los problemas que afectan al cuerpo y a la mente. 

El masaje permite recuperar esguinces, contracturas, dolores de espalda, ciáticas...Cura dolores de cabeza, sinusitis y migrañas. Según las técnicas que se utilicen, relaja o estimula y es muy adecuado para combatir el estrés, al favorecer el flujo sanguíneo y el linfático, lo que incrementa el nivel de oxígeno en los músculos y libera endorfinas (sustancia naturales que atenúan el dolor); mejora la movilidad del cuerpo. 

Sin embargo, el masaje está contraindicado en algunos casos. Por ejemplo durante los primeros meses de embarazo, en roturas musculares o en enfermedades infecciosas de la piel. También en traumatismo recientes, en hematomas e infecciones o en algunos procesos postoperatorios. Por ello, el terapeuta debe evaluar la conveniencia de un masaje y en su caso, elegir la técnica más adecuada para cada paciente.